La sociedad del statu quo se ha inmerso en una infinita variedad de teorías que buscan explicar el porqué y el cómo, de un virus que tuvo el potencial de hacerse pandemia global y además diseñar una «nueva normalidad» que nadie había pedido y menos deseado. Entre tanto, la sociedad se desgasta endosando la responsabilidad de ésta y otras crisis, no importa si son de carácter local o global, en quienes no tienen voz ni voto, para de este modo, evitar asumir la responsabilidad social que corresponde. Con ese propósito, se aferra a conceptos nada creativos y del todo incoherentes que van desde el negacionismo de la realidad, pasando por la insensatez del modelo económico, hasta la falacia de la política internacional. No importa, todo vale para pretender que todo marcha como debería pese a la evidencia que señala lo contrario. Y es que el ser humano se las arregla para adaptarse a todo, inclusive si no le conviene. Es todo un enigma.Este libro intenta «ponerse en los zapatos» de una sociedad que se considera perfecta, con la intención de ofrecer una visión imparcial, aunque con mucha dificultad cuando es evidente que en ausencia del sentido común toda imparcialidad pierde cualquier sentido. En todo caso, se consigue intuir que desde cualquier perspectiva y considerando todos los ángulos del prisma social, si hay una posible respuesta para la crisis sanitaria y económica ocasionada por la pandemia por coronavirus y para otras en camino. Sí, después de todo es posible mitigar y reducir los riesgos que implica el desarrollo económico, para que de una vez por todas, la sociedad pueda prescindir de la mascarilla como única solución a todos los problemas que le aquejan.